martes, 11 de noviembre de 2008

Por qué pasarse al software libre...

Ha pasado mucho tiempo desde la última entrada del blog, y no voy a hablar de lo que prometí... de momento.

Además en esta ocasión, más que un artículo, va a ser una serie de reflexiones... y cada uno que saque sus propias conclusiones.

Ando de peleas en mi casa porque he decidido montar Ubuntu en los ordenadores de mis hijos, y todos se me han echado encima...

¡¡¡¿Cómo que no vas a montar Windows?!!! ¡¡¡¿Qué vamos a hacer con todos los juegos que ahora ya no van a funcionar?!!! ¡¡¡¿Y mi messenger?!!! ¡¡¡¿Ahora que ya sé hacer algo con el pc, vas y me lo cambias?!!!
Y muchas similares que os podeis imaginar...

¿Y por qué he decidido yo que pongo Ubuntu? ¿Sólo porque veo cada vez más evidente que es una alternativa de futuro, y que merece la pena aprender a desenvolverse en él? ¿O es porque estoy harto de que cada pocos meses tenga que formatear ordenadores por virus y otros desordenes internos? O quizá es porque para evitar esos riesgos tengo que poner antivirus que me ralentizan el sistema...

¡Claro, es que en casa del herrero, cuchillo de palo! Ocurre que nunca tengo tecnología punta para mis propios equipos -que, dicho sea de paso, van evolucionando en su constitución interna a medida que consigo piezas de repuesto de equipos que van pasando por mis manos camino del desgüace... ¡Y así no hay forma de que funcione el windows come-recursos con la última versión del messenger-live y el reproductor multimedia con el navegador web y todo a la vez...!

Bueno, pues a lo mejor es un poquito de todo eso... y de saber que todo lo que hago con Windows lo puedo hacer con, por ejemplo, Ubuntu. TODO. Y más, porque hay cantidad de aplicacioncitas -léase juegos, entrenadores, etc.- gratuítas y además diseñada para gente que necesite aprender (por ejemplo, niños) y para entornos educativos...

... y de no tener que preocuparme tanto de los virus...

... y de que así tendré que dedicar menos tiempo al mantenimiento de estas máquinas...

... y de que, si en un momento determinado, necesito hacer funcionar un programa windows, siempre puedo hacerlo en un entorno virtual adecuado...

... y, sobre todo, que sé que tengo todo un mundo de documentación libre, gratuíta y no sesgada, a mi disposición en la red. Con lo que cualquiera puede aprender a solucionar un problema o a suplir una necesidad que le surja. La pega, claro, es que eso supone un esfuerzo extra...

Bueno, ya he reflexionado bastante... Hay, además, una razón de peso: yo también quiero aprender un sistema tipo Ubuntu en profundidad. Porque lo considero la mejor opción para una pequeña empresa que hace de los ordenadores un uso, esencialmente, ofimático; e incluso para un entorno profesional genérico que no necesite de una aplicación concreta sin un equivalente válido y potente en el mundo linux.

Y aquí llegamos al punto por el que hoy retomé la elaboración de este blog: un artículo, un tanto pesado por los legalismos que incluye, pero bastante consecuente con esta problemática.

Es de un blog de El Mundo (espero que no se mosqueen por nombrarles aquí, ya que encima les hago propaganda), y os recomiendo su lectura; especialmente a aquellos interesados en los aspectos legales de qué pasa con nuestros programas cuando tenemos que cambiar nuestra máquina...

http://www.elmundo.es/navegante/2008/11/11/tecnologia/1226389166.html

Para los que esteis interesados en cómo cambiar a Ubuntu:





PD: para todo aquel que dude que mi pc está hecho a cachos, os pongo aquí dos fotos de la última 'actualización' que sufrió, con motivo de ajustar su tamaño al del hueco de mi escritorio. Espero que os gusten.




No hay comentarios: